El legado de la Reina Isabel II sigue más vigente que nunca. En 2026, con motivo del centenario de su nacimiento, el Reino Unido celebrará su figura con una de las exposiciones más ambiciosas jamás dedicadas a su imagen pública: Queen Elizabeth II: Her Life in Style, una muestra que abrirá en primavera en la King’s Gallery del Palacio de Buckingham.

El proyecto reunirá cerca de 200 prendas y accesorios que retratan distintas etapas en la vida de la monarca, desde su niñez hasta sus últimos años en el trono. Más que un despliegue de moda, la muestra busca analizar cómo el vestuario fue un elemento clave en la proyección de su autoridad, discreción y continuidad institucional.

Entre los artículos más esperados se encuentra un vestido de gala diseñado por Sir Norman Hartnell en la década de 1950, elaborado en seda marfil y bordado con perlas, una pieza que resume tradición y sofisticación que definió su estilo. También se incluirán atuendos poco conocidos, como ropa de descanso, conjuntos de campo y prendas privadas usadas en su residencia de Balmoral.

Una muestra que celebra los 100 años de la Reina

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Curada por Caroline de Guitaut, experta en el patrimonio de la familia real, la exposición ofrecerá un recorrido por la narrativa visual que Isabel II construyó con disciplina. Cada elección de color, corte o accesorio fue parte de una estrategia silenciosa para comunicar estabilidad, neutralidad política y cercanía con su pueblo.

Si bien el vestuario real ha sido tema de otras exhibiciones, esta será la primera en abarcar con tal amplitud la evolución estética de una reina que supo usar la moda como lenguaje diplomático y herramienta de representación.

La apertura está programada para la primavera de 2026, y se anticipa que atraerá a visitantes de todo el mundo. Los boletos y detalles específicos serán anunciados en noviembre de 2025.

Este homenaje, que combina historia, elegancia y poder, permitirá conocer a la Reina Isabel II desde una nueva perspectiva: no solo como soberana, sino como una figura que entendió el peso simbólico de su imagen en cada aparición pública.